lunes, 8 de febrero de 2010

Es la bandera de la patria mía, del sol nacida, que me ha dado Dios...


Cruzando el claustro, en el centro de cuyo patio canta solitaria una fuente de piedra, se abre el portal de acceso a la que alguna vez fue el aula magna de la Universidad de Charcas. Una guía morena pero de razgos europeos explica como allí el vencedor de Ayacucho, Antonio José de Sucre, proclamó solemnemente la independencia del Alto perú con el nombre de Bolivia. Mientras avanza en su relato también camina en dirección de la sala contigua, más modesta que el gran salón que adornan los retratos de Bolívar y Sucre. Pasa de una sala a la otra olvidando que allí ocurrió un hecho más trascendente que la independencia de Bolivia. Pasa por allí sin contar que un 25 de Mayo de 1809 Bernardo de Monteagudo y otros patriotas darían inicio a la revolución de la América española. Del mismo modo olvida una sala pequeñita y oscura que guarda una historia olvidada.
En ese pequeño cuarto que la guía de turismo de la Casa de la Libertad de Sucre ignora, hay una vitrina de madera labrada y en su interior un paño raído, solemnemente desplegado sobre un fondo de rojo terciopelo con los bordes arañados por las guerras y el tiempo.
Hace ciento noventa y ocho años, en las barrancas de Rosario de Santa Fe Manuel belgrano inauguraba las baterías "Libertad" e "Independencia" para proteger las costas litorales del avance español enviado desde Montevideo. El 27 de febrero, no teniendo bandera, mandola a "hacer celeste y blanca conforme los colores de la escarapela nacional". Antes de que llegara la orden tajante del secretario del TRiunvirato, Bernardino Rivadavia, Belgrano debió partir hacia el norte y allí hizo bendecir por el cura Gorriti otra bandera. Con ambas marcho a la lucha. En septiembre de 1812 triunfó en Tucumán y repitió la victoria en febrero de 1813 en Salta. Continuó su avance hasta que fue destrozado por el enemigo entre octubre y noviembre de 1813 en las batallas de Vilcapugio y Ayohuma. Hasta allí llegaron aquellas banderas de Rosario y Jujuy; y en ese lugar fueron salvadas de la desonra por un curita patriota que las escondió detras de un cuadro de Santa Teresa en la capilla del pueblo de Macha a once kilómetros del campo de batalla de Ayohuma.
En 1883 las banderas fueron encontradas por el cura de Macha y remitidas a Sucre en 1885. El gobierno de Bolivia reintegro una de ellas a la Argentina y hoy se conserva en el Museo Histórico Nacional. La otra, la blanca celeste y blanca izada por Belgrano a orillas del Paraná, duerme su sueño de altiplano lejos de las verdes barrancas que la vieron nacer. Tal vez debiera regresar a Rosario de Santa Fe el próximo 27 de febrero de 2012 cuando se cumplan doscientos años de su creación.
Mientras tanto duerme sileciosa su sueño de gloria en aquella vitrina de la habitación chiquita en la Casa de la Libertad.
Algunos hemos tenido el privilegio de conocerla y en un silencio infinito sentir la sangre hinchar el corazón. Sea este mi homenaje a aquella primera bandera de la patria y a Don Manuel Belgrano.

5 comentarios:

Chuli! dijo...

Si te digo que se me llenan los ojos de lágrimas con tu relato... no te miento.

Gracias...

Anónimo dijo...

dos o tres cositas nomás:

1- me parece extraño que no se reivindique la revolucion del 25-5-1809, no digo acá, sino allá. Acá se la olvida exprofeso.

2- tampoco se si esa bandera debería regresar a Rosario. Es una bandera nacional, Bolivia, como integrante de las provincias unidas tiene su derecho a mantenerla, no se, digo nomás.

3- Blanca-celeste-blanca, como la del glorioso Lobo Entrerriano (este don Manuel me cae cada vez mas simpático)

Jorge

Canoba dijo...

me encantó lo que escribiste en resumida forma. justo estoy leyendo las batallas secretas de Belgrano, en plena derrota de ayohuma! podes creer!
Te felicito por la iniciativa, voy a seguir leyendo los otros artículos.

Unknown dijo...

Gracias Gringo, Chuli y Canoba por acompañar y opinar.
Gringo lo del Lobo muy bien, lo de si se queda alla o vuelve muy interesante para charlar y lo de el olvido de la Revolución del 25 de Mayo de 1809 a mi tb me llamó la atención... pero bue. Tal vez se la olvide por lo mismo que se la olvida aquí.

Chuli! dijo...

Uno hablando de la bandera de la patria... y salta gente con ... EL LOBO! dejá de hinchar jajaj